Me gusta sonreír ante las adversidades porque mi madre siempre lo ha hecho.
Me gusta ser infantil porque mis tíos nunca han perdido al niño que tienen dentro de ellos.
Amo leer y pintar porque desde pequeña mis padres y mi tío me han inculcado el amor al arte.
Me encanta hablar porque mi madre me decía que cuando nací ella deseo tener a alguien con quien hablar.
Soy muy sentimental porque me han enseñado que ser emotiva no es algo malo.
Siempre pongo la otra mejilla porque soy creyente de las segundas oportunidades, pero eso no significa que sea idiota.
Siento las cosas con mucho fervor porque me nace.
Marco las frases que me gustan de los libros con posits porque no me gusta subrayarlos.
Cunado tengo ganas de escribir y en ese momento no puedo, me pican los dedos.
A veces tengo sueños tan raros que mas despertarme grabo una nota de voz contando todo lo que soñé para después escribirlo.
Mi gran sueño es publicar un libro.
Siempre he dicho que si fuese millonaria sería una millonaria estrafalaria.
Mi plan de futuro es ser feliz en vivir al lado del cantábrico.
Mi ciudad favorita es París, aunque nunca he ido, pero no me caen bien los franceses.
Quiero viajar.
Me encantan los tatuajes.
Amo los piercings.
Cada que piso la calle de Montera me hago un nuevo piercing.
Amo dar abrazos.
Me encanta escuchar las historias de las personas.
Creo en el cielo, en Dios y en Jesús, pero no creo ni en la biblia ni en la iglesia.
Antes de un examen rezo dos veces.
Hay momento en los que me gustaría tener a mi padre presente.
Siempre presumo de mi familia.
Por encima de todo esta mi familia y mis mascotas, le siguen mis amigos y luego esta lo demás.
Me gusta estudiar aunque soy una estudiante de notas promedio.
Soy bastante vaga.
Odio hacer ejercicio, pero amo nadar.
De pequeña me acomplejaba mucho mi peso.
Me sigue acomplejando.
Mido 1'55 y siempre presumo cada que crezco.
Empecé a usar plataformas por mi poca altura, me acabe enganchando y ahora me encanta.
Odio los tacones.
No me gusta secarme el pelo.
De pequeña mi mayor sueño era tener el pelo como Rapunzel.
Siempre dije que quería ser una princesa, pero la verdad que de pequeña mi gran vocación fue ser doctora, hasta que me entere que en el primer año de medicina diseccionas un muerto.
Siempre he querido dejar huella.
Me han roto el corazón.
He llorado por amor.
Amo los unicornios.
Cada vez que voy a un cementerio y me encuentro alguna flor en el suelo la dejo en una tumba que no tenga nada.
Me encanta ir a los cementerios por más tétrico que suene.
Soy bibliófila y cinéfila.
Les tengo fobia a los caracoles.
Me encantan las películas de terror aunque me den miedo.
No me gusta la tarta.
El único helado que soporto comer es el helado de chocolate de Capri, el helado de Neskuiq de chocolate o el de nociolla del mercadona.
Mi pizza favorita es la cuatro quesos.
Soy alérgica a muchas cosas.
Mi hermano y mi madre son las personas que más amo en este mundo.
Mi madre es la persona a la que más admiro en el universo.
Creo en los fantasmas.
Creo en las sirenas y en los extraterrestres.
Tengo una lista de canciones que quiero dedicar a mi futuro novio.
Mi Twitter esta lleno de frases que me encanta.
Me gusta creer que Diego Velázquez es un antepasado mío porque tenemos el mismo apellido.
Poca gente sabe que tengo un lado muy dark.
Amo el color rosa y todas sus variantes.
Me encanta el olor a humedad, me recuerda a Santander.
Soy ultra fan de Harry Potter.
Tengo una obsesión con los regalices.
Mi mayor miedo es la muerte de mis seres queridos.
Hace poco me he aficionado a la música vasca.
Y todo lo que acabo de escribir no llega ni a describir un cuatro de lo que soy.