Bueno, el tema de hoy son los patinetes eléctricos, un método de transporte que se puso muy de moda hace más o menos un año. A raíz de esto, se han creado empresas que compraron patinetes eléctricos para alquilarlos como método de transporte alternativo, como pasó con las bicis. Esto se inició gracias a la creación de la norma de regulación de la contaminación de Manuela Carmena, en la que se impuso un sistema de etiquetas para los coches de tal manera que limiten el acceso al centro urbano.
Hace unas semanas, cuando todavía era menor de edad, mi querido amigo Luis me propuso ir a un sitio en patinete (nos daba flojera andar), pero todavía no tenía los 18, por lo que era ilegal.
Hace exactamente 3 días nos fuimos a La Latina a imprimir en 3d una maqueta para GDA. Después de mandarla imprimir, quisimos ir a Sol y vi un autobús enanito pasando por la calle. Desde que era pequeño siempre quise montar en un autobús así. Luis me acompañó a hacer mis sueños realidad. (Por cierto, el autobús era parecido a este en tamaño, pero era más moderno y eléctrico). Tras subirnos al bus, no tardamos demasiado en bajarnos (no lo hicimos en nuestra parada) pues el tráfico era muy lento y llegamos a la plaza de Canalejas.
Ahí decidimos que sería una buena idea que, ya que yo era mayor, cogernos unos patinetes eléctricos. Pues así lo hicimos, fuimos a la plaza de Neptuno, básicamente porque esa zona es muy transitada y era posible que hubiesen patinetes y así fue, encontramos un par de ellos. Estos los usamos para ir por El Retiro, donde ocurrió un leve accidente (me caí por ir haciendo el imbécil), pasamos por Atocha y volvimos a Neptuno a dejar los patinetes, aunque al final los dejamos en Gran Vía.
El día siguiente, nos fuimos su resi hasta Atocha en este apasionante vehículo. Dicho de otra forma, nos habíamos convertido en aficionados a este método de transporte.
Tras lo vivido, tengo que reconocer que es un método de transporte muy seguro (a pesar de lo que piense la gente), pues en las dos intensas jornadas nos hemos sentido con seguridad, pues los coches pasaban, como dice el código de circulación, a metro y medio de nosotros. Están limitados electrónicamente a 30 km/h también por ley, por lo que no puedes ir a toda leche.En contra podría poner el hecho de tener que pagar por el desbloqueo (1€ en la mayoría y en VOI 20 céntimos). Luego, aparte vale entre 15 y 25 céntimos el minuto dependiendo de la empresa e incluso empresas como Uber piden que tengas carnet de conducir (imagino que será por eso de que tienes que circular por la vía pública).
Después de decir esto tengo que reconocer que es un transporte moderno, rápido y accesible (si no te excedes como nosotros jajajaja) y que te permito que la gente te mire y se quede flipando, como me pasó con Carmen, la cual se quedó boquiabierta al verme montado en ese bicho dirigiéndome a la ETSAM y se empezó a mear de la risa (Carmen, te quiero jajajaj).Otra cosa a destacar es el hecho de que gracias al tremendo consumo que he tenido de estos bichos (me gasté casi 20€ en dos días) he pensado en comprarme uno, ignorando las indicaciones/recomendaciones de mis queridos papis (MAMAAA NO ME MATES XD (PAPAA TÚ TAMPOCO )). Estoy mirando uno con unos 30 kilómetros de autonomía, porque sería para ir desde mi casa a la escuela, por lo que menos se me va a quedar corto y con unos 30 km/h de velocidad máxima, porque más es un poco ilegal :).
Bueno, me despido por ahora, hasta otro momentitooooooooooo <3
Por cierto, si necesitáis alguna recomendación para empresas de estos patinetes, preguntadnos a Luis o a mí :).
