Doy un paso al frente mientras apago la luz que me cegaba.
Es ahora cuando puedo ver el camino más claro.
Tomo aire y avanzo hacia mí,
con miedo por adentrarme en un lugar que antes fue hogar
pero que descuidé hasta que se convirtió en paradero desconocido.
Buscaba en otros refugio para cubrir mis ausencias,
evitando la soledad para huir de mis sombras.
Y he tardado tiempo en descubrir que es aquí
donde debo habitar,
donde más segura me voy a encontrar siempre.
Aunque sé que es difícil no caer en vacíos disfrazados de felicidad,
siempre sigo avanzando poco a poco por la vida.
Y aunque el caos nunca se vaya del todo
y parezca que se va a quedar a vivir en mí siempre,
ahora encuentro la calma perdida en mis pensamientos.
Que sé que ya es tarde para borrar errores,
pero nunca lo es para aprender de ellos.
Doy un paso al frente
y descubro que
estar conmigo misma
es la mayor libertad que tengo